La Sidra de Hielo Valverán 20 Manzanas en una sidra especial, repleta de matices y con una carga frutal única. Es fresca, sorprendente y exclusiva . Está inspirada en las ice-ciders canadienses, que se elaboran con manzanas recolectadas heladas del árbol. Aunque en este caso, son las manzanas de Asturias quienes marcan la personalidad de este delicioso licor dulce.
Origen: Sidra de Hielo Elaborada en Asturias.
Variedades: Todas las manzanas utilizadas para su elaboración provienen de manzanas autóctonas asturianas que proceden de la pomarada propiedad del llagar: “Raxao”, “Durona de Tresali”, “Verdialona”, “De la Riega” y “Fuentes”.
ELABORACIÓN
El llagar de sidra Valverán es pionero en la elaboración de sidra de hielo en España. La elaboración es un proceso lento que necesita tiempo y paciencia, desde que se cosechan las manzanas en el llagar hasta la comercialización de la sidra de hielo transcurren dos años. Las manzanas son escogidas manualmente, lavadas y examinadas en una mesa de selección. Después, se trituran y se prensan, y el mosto obtenido se decanta en depósitos de acero inoxidable mediante aplicación de frío. Una vez clarificado, se procede a su congelación a menos 20 grados recreando en el llagar los efectos de las heladas y concentrando, de esta manera, los azúcares de la manzana de forma natural. Tras un proceso lento de separación del hielo y el mosto, la esencia obtenida fermenta durante 10 meses a una temperatura de 10ºC y después permanece durante 8 meses en depósitos de acero inoxidable sobre sus lías. Cada botella de este elixir contiene el mosto concentrado y fermentado de mínimo 20 manzanas.
NOTA DE CATA
VISTA: Color dorado con reflejos cobrizos, limpio y brillante.
NARIZ: Nariz franca y aromática, sensaciones dulces: miel, almíbar y caramelo. Aromas cítricos, confitura de naranja amarga, mandarina y fruta de la pasión, con predominio de manzana verde y notas de manzana caramelizada. También, aparecen ligeros recuerdos de fruta de hueso: membrillo fresco, albaricoque...
BOCA: Entrada dulce que recuerda a la miel. Exquisito equilibrio entre acidez y dulzor. El sabor es amplio y persistente, elegante y fino, con un final ácido que le otorga gran frescura. Una sidra de hielo muy fresca, con un resultado sedoso y largo recorrido. Origen: Concejo de Sariego (Comarca de la sidra, Asturias).
Grado Alcohólico: 10% vol.
Temperatura de Servicio: 7ºC.
Cristalería: Servir en copa modelo “Sauternes”.